Las ferias y centros de convenciones son esos lugares abarrotados y que desde el techo se ven como cubículos de oficina prácticamente indistinguibles. Por eso, es fundamental que tu stand sea reconocible y de fácil acceso.
Muchas son las claves lógicas que podemos tener en cuenta para planear un stand, pero las principales se basan en:
Un buen posicionamiento: no es lo mismo estar en la esquina pegado a la puerta de los baños que cerca de la entrada o los pasillos centrales. Cuesta más dinero sí, pero nos hace obligatoriamente transitables.
Consejo del día: digamos que no siempre es bueno estar en un lugar de tránsito. Por experiencia diré que ubicarte al lado del urinario de caballeros no es tan buena idea como puede parecer. Ahora sí, si estás al lado de la cafetería…amigo mío…vas a triunfar.
Un diseño único: las temáticas pueden ser muy variadas pero la imaginación y un buen planteamiento inicial del stand pueden hacernos destacar sobre nuestros competidores.
Consejo del día: el diseño puede hacernos perder la cabeza, es decir, de nada sirve que seamos llamativos si por ejemplo creamos un laberinto de paredes que dificulten la entrada de los visitantes y los encaminen hacia nuestro producto/servicio.
Ofrecer experiencias memorables: un stand es la representación de nuestra empresa y por tanto debemos tener en cuenta: el público objetivo, el catering, los regalos personalizados, etc.
Consejo del día: En el catering siempre triunfa el jamón, siempre falta jamón por muchos platos deconstruidos que ofrezca la competencia hecho con máquinas de humo. Eso sí, los tiempos cambian y no te debes olvidar de incluir opciones variadas para celíacos, intolerantes, vegetarianos,etc. ¡Pero no te olvides del jamón con palitos de pan!.
Regalos útiles y personalizados: los regalos son un universo paralelo en el que acabas en el taxi con una maleta cargada de souvenirs inútiles llenos de marcas por todas partes que coges sólo porque son gratis, pero jamás los vas a utilizar.
Consejo del día: por experiencia he de decir que los productos tecnológicos sencillos como un pen-drive son perfectamente válidos. Una vez me regalaron una mochila enrollable con forma de piña y la marca con tamaño 180 en negrita, obviamente, a no ser que ponga Calvin Klein pocos harán de la mochila un producto de propaganda adecuado.
Ofrece servicios complementarios: el catering es una gran idea para picar algo pero servir refrescos, agua y cerveza todo el día no es suficiente.
Consejo del día: de verdad, después de 6 horas de pie, si hubiera una fuente de café, todos los visitantes se lanzarían dentro. ¡Café largo, corto, con leche…como quieras…pero ofrece café!
Éstas son reglas lógicas, pero ¿Has pensado en todo?¿De verdad? ¿Y si surgen imprevistos en tu stand?←